Cuándo aplicar calor y cuándo aplicar frío

¿Cuándo aplicar calor?

El calor es beneficioso cuando nuestros músculos están tensos ya que ayuda a la relajación de éstos. Preventivamente ayuda a evitar que una sobrecarga vaya en aumento.

El calor tiene un efecto analgésico, relajante, vasodilatador (aumenta la circulación sanguínea) y aumenta la flexibilidad muscular por eso lo aplicamos en caso de contracturas musculares, problemas articulares, rigidez…

La manera en que se recomienda su aplicación es 3 veces al día 15 minutos como máximo cada vez, ya que sino el efecto que vamos a provocar va a ser contrario al que queremos conseguir.

¿Cuándo aplicar frío?

El frío tiene un efecto analgésico, antiinflamatorio, vasoconstrictor (reduce el flujo sanguíneo en la zona) y reduce el espasmo muscular en su momento más agudo, por eso, en cualquier lesión en el momento en que se produce colocaremos hielo, para conseguir que llegue menos riego sanguíneo a la zona y poder parar la inflamación y el edema.